Con frecuencia nos quejamos de la rutina, del estrés que nos genera el trabajo, el tráfico y todo tipo de responsabilidades que nos agobian. El problema es que lamentarnos de todo ello no resuelve nada, puesto que muchas de esas cosas son ineludibles, por lo tanto, lo ideal es alternar esas tareas con actividades placenteras. Y si además de diversión nos aportan otros beneficios, un tanto mejor. Tal es el caso de ir a disfrutar del golf Marbella.
Marbella es una espléndida localidad, por su agradable clima, espléndidos parajes, sus propuestas culinarias, el extraordinario trato de los lugareños, y en esa lista de maravillas no pueden faltar sus espectaculares campos de golf, diseñados para satisfacer hasta al individuo más exigente. No solo se esmeraron durante su creación, sino que continúan sus esfuerzos infatigables en el debido mantenimiento.
Clubes para todo público
Muchas personas se cohíben de practicar el golf y hasta de visitar las instalaciones de los clubes, precisamente, porque los ven tan ostentosos que los consideran inalcanzables. Si bien es cierto que en otros tiempos este deporte estaba restringido a la sociedad de un estrato económico elevado, esto ha cambiado mucho. Hoy día existe la posibilidad de asistir eventualmente, inscribirse en un curso o incluso convertirse en un asiduo participante.
La proliferación de clubes ha permitido que se abran las puertas a todo tipo de público, siempre y cuando se cumplan con las normativas que siguen vigentes para garantizar el debido comportamiento dentro de las instalaciones, respetar las reglas del juego, cuidar los espacios naturales y las estructuras adicionales dispuestas para el deleite de sus usuarios.
Beneficios de practicar golf
Es un deporte de bajo impacto, pero muy efectivo que contribuye de manera positiva al sistema cardiovascular, favorece las articulaciones, fortalece y tonifica los músculos, incide progresivamente en la flexibilidad, incluso representa un buen ejercicio para la mente. Estos por mencionar los beneficios directos, puesto que también es una excelente manera para compartir con familiares, amigos, compañeros de trabajo, socios, clientes, etc.
Lo mejor es que no existen limitaciones de edad ni género. Es cuestión de proponérselo y dejar las quejas a un lado, para darle paso a una actividad que ayuda en todos los sentidos.